

La escultura de Leopold Anzengruber, titulada "Joven africana", es una pieza de cerámica negra que destaca por su finura y expresividad. Esta obra, que representa a una joven africana, captura la dignidad y la belleza del sujeto con detalles sutiles en los rasgos faciales y la postura. El trabajo de Anzengruber, a menudo marcado por formas simples y elegantes, le da a esta escultura una presencia sobria y cautivadora.